Resum
Investigaciones previas han demostrado que el riesgo de contraer la infección por VIH entre migrantes mexicanos depende de la fase migratoria en que éstos se encuentran (ej. en México antes de migrar, durante el tránsito hacia o desde el Norte, en las comunidades de destino en los Estados Unidos, durante la detención y deportación, y tras retornar a México). Sin embargo, se tiene un conocimiento todavía insuficiente sobre las conductas sexuales específicas, las características de las parejas sexuales, y los contextos en que los migrantes tienen sexo durante estas distintas fases del proceso migratorio. Para cubrir este vacío, se usaron datos de una encuesta poblacional transversal realizada en Tijuana, México. La encuesta recogió información sobre la fase migratoria y los detalles del ultimo encuentro sexual de 1,219 hombres migrantes. Los resultados sugieren que, comparado con la fase que precede a la migración, los migrantes de retorno en sus comunidades de origen presentan una mayor probabilidad de tener sexo con otros hombres, sexo bajo la influencia de las drogas, y sexo sin protección. Los migrantes en la fase de tránsito en la frontera Norte de México presentan mayor probabilidad de tener sexo con parejas esporádicas y sexo servidoras. Los migrantes en la fase deportación reportaron con mayor probabilidad sexo anal y sexo bajo la influencia de las drogas (p < 0.05). Las fases de migración se asocian con distintas conductas sexuales, tipo de parejas, y contextos en los cuales los migrantes practican el sexo. Es preciso desarrollar intervenciones para reducir el riesgo de adquirir el VIH en migrantes mexicanos. Estas intervenciones deben enfocarse en las necesidades específicas de cada una de las fases migratorias.