Resumen
La Organización Mundial de la Salud, con
carácter general, señala que la lactancia
materna constituye actualmente la opción
más recomendable para alimentar a los niños
y niñas menores de un año, dados los múltiples
beneficios que ello conlleva no solo para la
salud del recién nacido, sino también por
otros factores de gran importancia como es
el vínculo que se establece entre la madre
y el bebé durante la lactancia, la dificultad
de acceso a agua potable y a la leche de
fórmula en países en desarrollo, así como
el coste de la misma.