Resum

Las pruebas de cuarta generación para la detección del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) representan un avance significativo en el diagnóstico temprano y preciso de esta infección, combinando la detección de anticuerpos contra el VIH y el antígeno p24 en una única prueba. Este estudio documental y retrospectivo tiene como objetivo analizar las ventajas y desafíos asociados con el uso de estas pruebas en el laboratorio clínico, considerando publicaciones científicas y normativas emitidas entre 2020 y 2024. Entre las principales ventajas, destacan la reducción de la ventana diagnóstica, la mejora en la detección de infecciones agudas y la capacidad para identificar casos en fases iniciales de la infección, lo que permite intervenciones clínicas más oportunas. Asimismo, se evalúan los retos, como la necesidad de infraestructura adecuada, personal capacitado, costos asociados y posibles resultados falsos positivos debido a la alta sensibilidad. Los hallazgos resaltan la importancia de establecer protocolos de calidad, la capacitación continua del personal y la integración de estas pruebas en programas de vigilancia epidemiológica. Estudiando este articulo particular encontramos datos suficientes para hacernos pensar que la mejor técnica para detectar el virus como aplicación, contribuye a fortalecer las prácticas del laboratorio clínico, optimizando la detección del VIH y promoviendo estrategias de diagnóstico más eficaces y accesibles en distintos contextos de atención.