Resumen
Objetivo: analizar la supervivencia y factores asociados a mortalidad en una cohorte de pacientes con infección por el VIH.
Métodos: se incluyeron todos los pacientes diagnosticados de infección por el VIH en nuestro centro entre 1997 y 2013. Se dividió el tiempo del estudio en dos periodos: 97-05 y 06-13. Muerte precoz: en los primeros seis meses tras el diagnóstico y muerte tardía: después de seis meses. Se estimó la probabilidad de supervivencia con las curvas de Kaplan-Meier y para el contraste de curvas se utilizó el test de log-rank. Fecha de censura: 30/06/14, fecha de pérdida de seguimiento o fallecimiento. Programa estadístico SPSS 20.0.
Resultados: se han incluido 1.251 pacientes. El 83,6% eran varones y en 86,8% la transmisión del VIH fue sexual. En el momento del diagnóstico, la mediana de edad fue 42,7 (32,8-50,7) años y de linfocitos CD4 296 (96-500) cél/mm3. Durante una mediana de seguimiento de 5,0 (1,7-9,8) años, han recibido TAR el 85,4% de los pacientes. La media de supervivencia fue de 14,8 años, con una probabilidad de supervivencia del 95,6% el primer año, 91,3% a los 3 años, 89,2% a los 5, 83,4% a los 10 y 75,5% a los 15 años. Se registraron 166 (13,3%) fallecimientos, siendo 42 (25,3%) de ellos muertes precoces. Las principales causas de muerte precoz fueron pneumocistosis (16,6%), linfomas (14,2%) y cuadros neurológicos (23,8%) y como causa de muerte hepatopatía (8,0%), neoplasias no sida (8,0%), procesos neurológicos (6,4%) y suicidios (2,4%). La mortalidad se asoció a bajo nivel de estudios (OR 2,29, IC95% 1,4-3,6; p=0,0001), período 97-05 (OR 3,6, IC95% 2,1-6,0; p= 0,0001), no TAR (OR 2,4, IC95% 1,2-4,7; p= 0,006), CV detectable (OR 5,04, IC95% 3,0-8,3; p= 0,0001), sida (OR 6,60, IC95% 4,0-10,7; p=0,0001) y ENOS (OR 2,97, IC95% 1,8-4,7; p=0,0001).
Conclusiones: La probabilidad de supervivencia de la cohorte es elevada, ocurriendo una cuarta parte de los fallecimientos en los primeros seis meses tras el diagnóstico de la infección por el VIH. La mortalidad se asocia a bajo nivel cultural y no uso de TAR con mal control virológico y desarrollo de sida y ENOS. La mortalidad ha disminuido en los últimos años. (Extraído del documento)